Bangkok desde las alturas en 4 momentos del día

Conocer una ciudad recorriendo sus calles y perdiéndose por distintos barrios es una de las mejores formas de conocer la vida local, de adentrarse en una cultura ajena y verlo todo de cerca. Sin embargo, las alturas atraen cada vez más para obtener una panorámica del destino, al puro estilo de un ave que observa el ritmo y el bullicio desde lo alto.
 
Estos momentos no solo se graban en las retinas del espectador, sino que también los inmortalizan las cámaras al más puro estilo postal. Y si una ciudad puede presumir de tener opciones para esta vista de pájaro es sin duda Bangkok. La capital tailandesa conjuga a la perfección los verbos evolucionar (con sus tremendos rascacielos) con mantener la tradición (con sus pequeñas casas y templos por cada esquina).
 
En esta ocasión presentamos una selección diferente para maravillarse con el skyline de la ciudad desde diversos puntos estratégicos, desde los más comunes hasta los más atrevidos.
 
El primero es el más básico, el hotel. Alojarse en la planta 20 o 30 ofrece, tras unos segundos de ascensor, alcanzar unas preciosas vistas que contemplar nada más despertarse y fantasear con lo que deparará el día.
 

 
Tras un buen desayuno llega el momento de comenzar a moverse por la ciudad y una de las formas más económicas, rápidas y cómodas (el aire acondicionado se agradece aunque en ocasiones esté demasiado frío) es el Skytrain BTS. Hay diferentes tipos de tickets que se adaptan a las necesidades de todos, desde el bono para un día hasta los viajes sencillos de un solo trayecto. Este medio de transporte es similar al metro, salvo por un detalle, no va bajo tierra sino que sus vías están elevadas. Gracias a esta característica los desplazamientos de un punto a otro ofrecen diferentes vistas desde lo alto para contemplar el día a día de los tailandeses.
 
 
Entre las visitas turísticas más conocidas están el Palacio Real, templos como el Wat Pho… pero si alguno ofrece vistas de impresión es el Wat Arun. Varios escalones con una inclinación muy pronunciada conducen a una altura de casi 80 metros. Al atardecer, desde aquí, se visualiza una de las principales arterias de la ciudad, el río Chao Phraya que cuenta con un abundante tránsito de barcos, long tail boats y otras embarcaciones que descongestionan el tráfico en la ciudad.
 
 
Y para terminar con el cuarto momento del día llega la hora de cenar. Hay infinidad de opciones, desde la famosa comida callejera hasta los mejores restaurantes de Asia. Pero si lo que queremos es disfrutar de vistas de noche podemos optar por algunos de los rooftops más modernos y acogedores de la ciudad para disfrutar de una cena al aire libre con Bangkok a los pies. Y como sorpresa… las vistas continúan en el baño! Ese es el caso del Above Eleven. Toda una experiencia urinaria.