Realmente este titular es una obviedad porque esta ciudad nunca duerme, nunca para y nunca deja indiferente, así que los noctámbulos están de enhorabuena porque además de divertida y segura, en cada rincón aparecen sorpresas inesperadas: un bar coqueto con música en directo, un templo abierto hasta el amanecer, un pequeño restaurante para desayunar unos noodles antes de ver el sol, un rooftop para despedir el día, unos mercados nocturnos por aquí y por allá y así hasta el infinito porque infinitas son las formas de diversión que ofrece la llamada “Ciudad de los Ángeles”, o Krung Thep o Bangkok…
Pero en esta primera parte de Bangkok para noctámbulos queremos enseñar algunos de los mejores “bares y restaurantes de altura”, en todos los sentidos.
Para empezar la noche hay que terminar bien el día y lo mejor es ver la puesta de sol de rooftop en rooftop, que en esta ciudad cada vez hay más y mejores. Desde que hace años Banyan Tree abriera su restaurante Vértigo, en la planta 61, o el Sirocco de la State Tower se hiciera archiconocido por rodar en él Resacón en Tailandia, poco a poco se han ido abriendo por decenas y todos ellos han contribuido a hacer de Bangkok una de las ciudades más chic de Asia.
Uno de los más de moda es Above Eleven ubicado en la planta 33 de las Fraiser Suites, en Sukhumvit soi, 11. Se puede ir a cenar su deliciosa comida nikkei en el restaurante o simplemente tomar una copa admirando las vistas en su Gramercy Park, un bar con dj’s y mucho glamur.
Otro para tener en cuenta y que no es muy conocido es el Scarlett en la planta 37 del hotel Pullman G de Silom. Se trata de un restaurante mediterráneo, su chef es francés, con una extraordinaria carta de vinos. Las vistas desde allí son impresionantes.
Otros dos imprescindibles son el Horizon by Heaven Bangkok , situado en medio del distrito de compras de la capital, entre las plantas 17 y 20 de la torre Zen World en el centro comercial Central World. Sofisticado y urbanita; y el Zoom de Anantara Sathorn, en la planta 40 ofrece 360º de vistas imponentes y una extraordinaria y completa carta que va desde cocina mediterránea a delicias orientales.
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El Three Sixty del Hilton Millenium es uno de esos lugares que no se olvidan. En la planta 32 del hotel y a orillas del Chao Phraya se encuentra esta joya para tomar una copa con vistas al río. Y parece ser que cuando se encuentra en Bangkok, Lewis Hamilton es un asiduo…
El Red Sky del Centara ubicado en el piso 55, en la azotea del lujoso hotel Centara Grand, no sólo ofrece los más sofisticados cócteles sino también vistas de 360º del skyline de la «ciudad de los ángeles». Es, sin lugar a dudas, uno de los “must” de Bangkok y sus luces led que abarcan medio edifico cambian constantemente de color iluminando la noche y consiguiendo que se reconozca el edificio a kilómetros de distancia.
Para los más alternativos cabe destacar el acogedor y económico The Nest cuyas fiestas suelen ser memorables y The Roof del hotel Sala Rattanakosin, aunque su altura no es comparable al resto ya que está en la planta cuarta del hotel boutique Sala Rattanakosin, en la orilla del Chao Phraya, tiene unas vistas impresionantes al Wat Arun y otros sitios históricos. Perfecto para la primera copa antes de cenar en su restaurante del primer piso que ha sido reconocido como uno de los mejores de Bangkok, y no solo por sus vistas…
Finalmente, uno de los últimos y que comienza a pegar fuerte es el Speakesasy del bellísimo hotel boutique Muse Bangkok. Se encuentra entre los pisos 24 y 25, con un estilo inspirado en los clubes americanos ilegales de los años 20 en la época de la Ley Seca. Cada rincón de este lugar, así como su clientela, rezuma sofisticación.
Un último apunte: la mayoría abren a partir de las 18:00h. y el sol suele ponerse alrededor de las 18.30. Y casi todos cierran sobre la 1:00h.
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