En Tailandia hay algunas de las cascadas más hermosas del Sudeste Asiático. Caminar hasta esos saltos de agua nos permite estar en contacto con la naturaleza del país y, en algunas de ellos, darnos un refrescante baño en las pozas que se forman a sus pies. Estas son algunas de las cascadas más espectaculares del País de las Sonrisas.
Cascada de Erawan
La ascensión al Parque Nacional de Erawan, en Kanchanaburi, depara muchas sorpresas por el camino. En el parque se pueden visitar siete cascadas, cada una con sus propias características.
Aunque las cascadas son ya suficientemente hermosas a la vista, también puedes refrescarte en las piscinas naturales o incluso meterte en el interior para ver la cascada de cerca. La caminata es pura aventura y la última cascada es un poco difícil de alcanzar. Sin embargo, si no puedes llegar hasta la cima, al menos podrás contemplar una o dos de las impresionantes cataratas del parque.
Cascada de Pha Charoen
En la provincia de Tak, podemos ver un maravilloso salto de agua de 97 niveles en el bosque, conocido como cascada Pha Charoen. Sus aguas azules y cristalinas bajan por rocas calizas, formando en el fondo un tranquilo estanque.
El entorno en sí dejará sin aliento, ya que la cascada está rodeada de selva y abundante flora. La cascada se encuentra en el Parque Nacional de Namtok Pha Charoen.
Cascada de Mae Ya
Si viajas a Chiang Mai, no te pierdas esta cascada fuera de lo común, a tan solo una hora de las afueras de la ciudad. La cascada de Mae Ya es un espectáculo digno de contemplar dentro del Parque Nacional de Doi Inthanon.
Es una de las más altas de Tailandia, con casi 250 metros de altura, y atrapa con las diferentes capas que va formando el agua. La mejor época para visitarla es durante la estación verde, cuando el agua fluye en su máximo esplendor.
Na Muang
Una buena opción en Ko Samui es acercarte a las cascadas de Na Muang, que se encuentran a unos doce kilómetros hacia el interior de la bahía de Nathon y a las que se llega por un sendero a pie.
La primera cascada, conocida como Na Muang 1, desemboca en una bonita piscina natural que proporciona un fresco escape del calor. A unos 30 minutos a pie, cuesta arriba, se encuentra Na Muang 2, más pequeña pero igualmente atractiva. El entorno de las cascadas es selvático y exuberante por lo que hay que tener precaución de no resbalar en el sendero.
Tak Umphang Thi Lo Su
Las cataratas Thi Lo Su, ubicadas en el Santuario de Vida Salvaje de Umphang, están entre las más grandes de Tailandia. En las caídas de los diferentes saltos se forman unas espectaculares piscinas naturales en las que está permitido el baño.
El entorno natural de la cascada, rodeada de bosque tropical, es de gran belleza y está en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
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