Un viejo dicho de los viajeros es que “antes de ir de vacaciones, siempre debes hacer un agujero extra en tu cinturón” y si el viaje te lleva a Tailandia, la expresión cobra más fuerza todavía. Destino gastronómico de referencia, el País de la Sonrisa atrae a gourmets de todo el mundo. Aunque esto no quiere decir que las aventuras culinarias tailandesas se tengan que llevar a cabo en los restaurantes más exclusivos. De hecho, parte de la comida tailandesa más inspirada se sirve en restaurantes que buscan redefinir la experiencia gastronómica, sirviendo deliciosas propuestas en un ambiente único. Hoy, en el blog de Turismo de Tailandia, te proponemos una cuidada selección de lugares donde viajar con el paladar.
The Giant, Chiang Mai
Situado a unos 50 kilómetros al noreste de Chiang Mai, The Giant hace honor a su nombre. Es verdaderamente enorme en todos los sentidos… Su menú está más centrado en pequeños bocados y pasteles… pero lo que realmente llama la atención es el local. Construido alrededor del tronco de un árbol alto, sus espectaculares vistas de la selva tropical son de auténtico vértigo.
El acceso al restaurante es toda una aventura, ya que se hace a través de un puente de cuerda de bambú. Para aquellos que buscan cambiar el postre por un subidón de adrenalina, The Giant también ofrece una increíblemente divertida tirolina que te permite volar a través de la selva al estilo de Tarzán.
Unicorn Café, Bangkok
El nombre le viene a las mil maravillas a este coqueto café ubicado en el corazón del bullicioso distrito de Silom, en Bangkok. Podría decirse que es un país de maravillas sacado de un cuento de hadas. Su interior esconde un sinfín de cosas mágicas y extravagantes. Es un referente para los viajeros LGBT+, ya que más de uno se siente como en casa una vez que cruza el umbral. Aunque el interior es ‘too much’ cuando entras (suelos, techos, paredes y muebles con temática de unicornio), el Unicorn Café es un templo para Instagramers.
En cuanto a la comida, recomendamos probar tantas cosas como sea posible. ¿Por qué no empezar con un plato de espaguetis arco iris y continuar con un gofre de unicornio en forma de pastel para el postre? En serio, ¡las opciones son infinitas!
www.facebook.com/Unicornbrand
Hajime Robot, Bangkok, Tailandia
El Hajime Robot es un restaurante que ha contratado a todos los robots más amigables de la ciudad. Esta institución gastronómica es visita obligada para los geeks. Los huéspedes de este japo son servidos por droides. Aunque eso no significa que el servicio sea frío o poco amistoso… De hecho, diríamos que los robots son tan encantadores como eficientes, y en cualquier caso, son apoyados por sus colegas humanos. No hay que preocuparse por una revuelta de robots durante la cena, cumplen todos los principios de la robótica postulados por Isaac Asimov.
El menú que se ofrece aquí es lo más parecido a los sabores japoneses originales que se pueden encontrar en cualquier lugar de la capital tailandesa. Por suerte para el viajero, Hajime está situado cerca del pulmón verde de Bangkok, Bang Kachao, lo que lo convierte en el lugar perfecto para cenar después de un día de viaje por la zona.
Koh Kood Tree Pods, Soneva Kiri Resort, Tailandia
El Tree Pods es uno de esos lugares geniales donde medio mundo se muere por reservar mesa. Es extraordinariamente extravagante y forma parte del lujoso resort Soneva Kiri. Similar a The Giant, sus comensales cenan en lo alto de los árboles, aunque las vainas parecidas a un nido de este restaurante de Koh Kood ofrecen una sensación de privacidad sin igual. De hecho, una vez que la vaina se ha encaramado en el árbol, el camarero sólo podrá servir la comida por medio de una tirolina.
Los ingredientes que sirven se cultivan en el propio jardín orgánico del restaurante. Aunque esta inolvidable experiencia gastronómica no es barata, vale la pena rascarse el bolsillo y disfrutar de una velada en este lugar mágico, sin duda os dejará un sabor tropical en el paladar que perdurará para siempre.
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