Manifestaciones artísticas tradicionales de Tailandia

Texto: Rafa Pérez / Fotos: Rafa Pérez y Turismo de Tailandia
 

Pese a que Tailandia no ha estado nunca bajo la dependencia de otro país, a lo largo de los siglos la ancestral cultura y las artes tailandesas han recibido influencias provenientes de diferentes países asiáticos, principalmente de India y China. Esto ha afectado no solo a los movimientos, la plasticidad, el vestuario y los significados de formas de expresión tales como la danza, el teatro o la pintura, sino también a las creencias sobre las que se asientan todas estas expresiones artísticas. Todas tienen en común un refinado sentido estético, entre las más relevantes están las danzas, que se dividen entre clásicas y folclóricas, el muay thai, los tatuajes, el teatro de marionetas o las pinturas murales, entre otras. De todas ellas, hablamos hoy en nuestro post semanal.¡Comienza a leer!.

 
Khon
 

El khon es una de las formas más elevadas de danza clásica tailandesa. Este teatro danzado incluye música, tanto vocal como instrumental, coreografía, elementos referentes a la literatura, rituales y el uso de máscaras. Representa escenas de la epopeya de Rama, avatar del dios hindú Vishnu. Durante mucho tiempo, el khon fue un arte escénico considerado elitista porque estaba auspiciado por la realeza. No obstante, podía ser representado por gente de diferentes estratos sociales. Entre las virtudes que fomenta el khon están el respeto por las personas mayores, a las que se considera fuente de sabiduría, la identificación del bien sobre el mal y la cohesión social. Desde 2019, el khon forma parte de la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

 

 
Muay Thai
 

El Muay Thai es muy popular en Tailandia. Esta práctica hunde sus raíces en la ancestral práctica del Muay Boran, una agrupación de varias artes marciales que al contrario que el Krabi Krabong no utilizaba armas (krabi es un tipo de sable y krabong una vara). Los luchadores llevan, durante la oración previa al combate, un tocado de cuerda en la frente conocido como mongkhon. Tradicionalmente considerado como un amuleto, el mongkhon era entregado por el entrenador cuando consideraba que su pupilo estaba preparado. En Tailandia podemos apuntarnos a clases de iniciación al Muay Thai que van desde unas pocas horas hasta los cursos de varios días.

 

 
Tatuajes
 

Los Sak Yant son una clase de tatuajes que se cree que aportan protección y buena suerte, muy comunes en los cuerpos de los practicantes de Muay Thai. Lejos de ser una cuestión estética, como suele ocurrir en Occidente, los tailandeses se hacen estos tatuajes porque realmente creen en sus significados y en su poder protector. Sus diseños mezclan creencias budistas, animistas y de otras religiones minoritarias. Entre los más frecuentes están el Hanuman, el dios mono que representa el coraje; el Gao Yord, que tiene poderes universales y representa los nueve picos del Monte Meru; el San Yant o del tigre; el Ha Taew, cinco líneas que equivalen a otros tantos hechizos escritos en sánscrito; y el Paed Tit, la rueda del Dharma, ocho caminos para llevar una vida sin sufrimiento.

 

 
Nǎng Tàlung, los títeres de sombra
 

La provincia de Nakhon Si Thammarat es un buen lugar para ver una representación de nǎng tàlung tailandés, el espectáculo de sombras con marionetas, un arte escénico por el que la región es famosa. En la localidad de Muang podemos asistir a las representaciones del teatro de sombras del tío Suchat Sapsin. Además de artista, Suchat es el artesano que fabrica los títeres protagonistas. En cada actuación se tiene en cuenta el concepto “Thainess”, cuidando al máximo las tradiciones y utilizando instrumentos musicales tailandeses para amenizar las funciones. También podemos visitar un museo, en la propia casa del artista, para conocer la historia de los títeres y ver algunos tan curiosos como el gobernador, el gigante, el fantasma o la deidad, entre otros muchos personajes.

 

 
Lakhon lek
 

El teatro tailandés de marionetas, conocido como Lakhon lek, se escenifica con marionetas que miden alrededor de un metro manejadas por tres titiriteros. El espectáculo se desarrolla al ritmo de la música y de una narración de alguna historia del Ramakien, la versión tailandesa del Ramayana hindú. Muchas de las marionetas responden a formas similares a los bailarines de kohn, con apariencia humana, y están moldeadas con arcilla.

Los brazos y las piernas se fabrican con tela que se rellena de algodón, las articulaciones son de madera plegable para que las extremidades tengan un movimiento realista. Las manos y los pies se tallan en madera de Thong Lang, ligera y fácil de dominar y los trajes se confeccionan con telas artesanales, cosiéndolos a mano mediante técnicas tradicionales de costura. Los titiriteros deben poseer un profundo conocimiento de la danza khon con el fin de que parezca que la marioneta baila grácilmente, tienen que estar coordinados para actuar como un solo personaje: uno controla la cabeza y la mano derecha de la marioneta, otro la mano izquierda y el tercero los pies.

 
Ram Wong
 

La danza folclórica ram wong tiene su origen en el ram thone (ram significa danza y thone es una clase de tambor de pequeño tamaño). Es una danza milenaria, de origen jemer, en la que participan tanto mujeres como hombres. Se practica danzando en círculos —su nombre significa precisamente esto—, al ritmo del tambor, con movimientos bastante lentos y elegantes tanto de los pies como de las manos. Las parejas doblan las palmas de las manos con los dedos en ángulo recto respecto a las muñecas, llevando las manos hacia arriba desde detrás del cuerpo hasta la cara, doblando los dedos al ritmo de la música durante todo el recorrido. Las manos se mueven en direcciones opuestas, una a la izquierda y otra a la derecha. Las piernas deben moverse al compás del ritmo y en dirección contraria a la de la pareja de baile.

Durante la Segunda Guerra Mundial se promovió el ram wong para alegrar a la gente y también como reivindicación cultural frente a bailes extranjeros, como el foxtrot o el vals, que habían entrado en el país. Para ello se aprobaron medidas como dar a los funcionarios medio día libre a la semana para que lo practicaran en las oficinas.

 

 
Danza de apsarás
 

Esta es una de las pruebas más evidentes de las influencias artísticas recibidas de otras culturas. La danza de apsarás tiene su origen en Camboya, en la cultura jemer. Las provincias de Buri Ram y de Nakhon Ratchasima tuvieron mucha importancia durante la época del Imperio Jemer, como lo atestiguan los recintos arqueológicos de Phanom Rung o Phimai. La danza de las apsarás, ninfas acuáticas de la mitología hindú, han formado parte de la cultura jemer durante siglos y son un elemento clave en la decoración de la arquitectura, como podemos ver en los bajorrelieves de los mencionados parques arqueológicos. Las apsarás danzan al ritmo de los Gandharvas, los músicos de la corte de Indra. El festival de Phimai, que tiene lugar durante la segunda semana de noviembre, incluye este tipo de danza en su programa.

 

 
Pintura mural
 

En numerosos templos del país podemos encontrar paredes decoradas con exquisitas pinturas murales. El propósito de esta forma de arte es el de la enseñanza, ya que muestra escenas de jakata, relatos que explican episodios de la vida de Buda, y del Ramakien, la versión tailandesa de la epopeya india Ramayana. Entre las más espectaculares están las del Wat Pho y las de la galería que rodea el Templo del Buda Esmeralda, en el Palacio Real, ambas en Bangkok. Estas últimas representan los diferentes avatares de Phra Narai así como la historia completa del mencionado Ramakian. Las pinturas van acompañadas de versos grabados en losas de mármol incrustadas en las columnas que rodean la galería.